22 abr 2012

Cap-60: Epílogo


Narrado por Justin
 
Ella se despide de mí, como sí nada hubiera pasado. Me abraza suavemente ante la atenta mirada de él. Y pienso lo inevitable. Que él la supo amar mejor que yo, que tuvo la valentía de decir “Te acompaño hasta el fin del mundo” mientras que yo…yo no hice eso. Sólo pensé en mí. Pero ya no se puede hacer nada. Quizás es que él la comprende mejor que yo. No lo sé. Me toco la sien. Sonríe mientras me susurra al oído “Hablaremos algún día
Asiento suavemente. ¿Y ahora que digo? Parece que lo de ayer no la ha afectado en absoluto. La verdad, no fue como antaño. Fuego prendido de cenizas, sin ningún fundamento, sólo destinado a consumirse lentamente. La veo montarse en la moto de él. Se pone el casco. Le miro a él, de su casco caen mechones rubios sobre unos ojos verdes. Levanto la mano a modo de saludo. Gin me sonríe por debajo de su casco. Y él arranca hasta de poder decirme nada. Me quedo ahí plantado. En París. Pensando que quizás no encontraré a otra igual que a mi Gin, porque esa chica ya no existe. Ha crecido al igual que yo. Puedo volver la vista atrás sin que me corroa la pena. Todo esto estaba destinado a pasar. Desde nuestro encuentro hasta nuestra despedida. Y la verdad, no me arrepiento de nada.
FIN

Cap-59: París, donde todo es posible.

Heeeeeeeeeeeeeeey!!:) Que de tiempo people, sólo vengo a dejar el último capítulo después de nosecuanto tiempo -.- jajajajajaja y ahora quiero subir el epílogo, que va a ser cortito cortito, sólo para despidirme. Situaros que ha pasado dos años o por ahí ^^  La letra en cursiva de la segunda parte es de esta canción -> http://www.youtube.com/watch?v=gDmaX5iCwwY  y para la última parte (lo que está en cursiva) es parte de esta canción -> http://www.youtube.com/watch?v=owSm2J-0WJk&feature=fvwrel




Narrado por Justin
Nunca digas nunca, pero ten por seguro que nada es para siempre. Que extraña contradicción ¿Verdad? Pero es una realidad. Ni siquiera lo que más quieres va a ser para siempre, todo acaba alguna vez. Porque nacemos para morir algún día. Y sé que ahora soy el adolescente más famoso del momento pero dentro de cinco años ¿Quién seré? Aquel chico del Baby seguramente. Sonrío amargamente. No quiero decir que no me guste mi vida, pero me falta algo. Y sé perfectamente  lo que es. Hace demasiado tiempo que lo niego, pero ya puedo pensar con objetividad sin estar cegado por la pena o el odio. No lo puedo negar, la he odiado. Se fue y me dejó aquí, dejó lo que teníamos. Nosotros que nos juramos amor eterno. Que teníamos nuestra vida ya resuelta. Pero ahora ya lo veo claro. Sólo hemos sido víctimas de eso a lo que llamamos destino. Nadie tuvo la culpa. Suspiro mientras me pongo los cascos. Miro por la ventanilla del avión. Va a ser un vuelo un poco largo, el mismo viaje que hice con ella pero a la vez uno distinto. Hace tiempo que no desentierro viejos recuerdos, traté de cortar todos mis lazos con ella cuando cortamos pero…hubo uno que no pude cortar, mi amor por ella. Siento el familiar cosquilleo y la sensación de caída que me produce el avión. Me tengo que sujetar al brazo del sillón. No soporto el avión. Siento una mano suave y dulce acariciarme el brazo con suavidad. La miro. Me inspira ternura, como sí fuera mi hermana. Pero nada más. En ocasiones, cierro los ojos y trato de imaginarme como sería todo sí su padre no hubiera vuelto, pero simplemente no puedo imaginarlo. Me pregunto cómo será ahora, sí habrá cambiado mucho, sí habrá encontrado a alguien. A alguien que la haga sonreír como yo. Apoyo mi cabeza en el asiento. Por primera vez, el avión no es mi preocupación ahora.


                                                              ●●●
Dicen que París es la ciudad del amor. Quizás por eso fue mi primer viaje con ella. Ahora que pienso, la verdad es que fue porque tenía que ir allí para una firma de discos. Me acaricio el mentón con suavidad. Nuestro último verano. Paseando por la lluvia alrededor del Sena. Sus dulces besos bajo de la Torre Eiffel. Aún puedo oír sus “te quiero”  paseando por las calles en flor. Nuestro último verano. Recuerdos que siempre perduraran. La única imagen que no borré de ella. Nosotros juntos en verano. Felices. Enamorados. Sacudo la cabeza de nuevo. Selena me notaba raro, es verdad, siento que algo se ha accionado en mí. París. Ciudad de sueños, de amores, de esperanzas, de vidas. No es simplemente una ciudad. Es nuestra ciudad. Camino solo por las calles, aspirando un suave olor a jazmín. De pronto, una silueta rubia de perfil. Me acuerdo de ella. Está en un bar, trabajando de camarera. Me recuerda un montón a ella. Pero esta es rubia. Y mueve su melena rizada con la mano, dejando ver unos pómulos rosados, con una sonrisa amable.  Recoge el pedido y mira con expresión soñadora a la ventana. Y de pronto posa sus ojos en los míos. Su boca forma una pequeña O mientras que yo la saludo con la mano. Se lleva las manos a la boca. La gente se acerca a ella y ella simplemente se traga la sorpresa y continúa. Entro al bar y me siento en una mesa luminosa. La veo sonreír, una sonrisa surcada por tristeza. Ella se acerca lentamente a mí, tiempo suficiente para recordar nuestra historia. Me dirige una mirada limpia, sin odio pero sin amor. Por fin llega hasta a mí.
-¿Qué quiere?- Me dice simplemente. Yo la sigo mirando. ¿Qué que quiero? Llevarte al cine los domingos. Tener que levantarme pronto y reparar los cuadros rotos. Observarte a mi lado y examinar todas tus curvas, seguidamente el saboreo de toda tu carne cruda. Sin dudar mis sentimientos, querernos hasta ancianos. Solo quiero ser feliz y que lo seas junto a mí. Le habría dicho hace tiempo. Sin embargo, hoy contesto:
-Una coca-cola por favor- 
Ella sonríe complacida y me trae mi pedido acompañado de una nota que dice: Saldré de aquí a las nueve, espérame entonces;) Dejo la nota sobre la mesa y me bebo mi coca-cola tranquilamente. Me quedo sentado una hora, dos, tres, hasta que ella entra y se quita la ropa del trabajo. Sigo en el mismo sitio, observándola, tal como llevo haciendo estas tres horas. Finalmente, ella termina sonriente. Se acerca a mí y me da dos besos. Ya no huele como antes. Huele a ciudad, a tristeza, a lluvia, pero, sobre todo, huele a él. A otro chico. Me corazón se paraliza por un segundo, pero luego se recupera. Es normal. Ella también lo ha pasado mal. También habrá llorado a escondidas y se habrá levantado con una sonrisa para no levantar sospechas. También se habrá sentido frustrada. También habría sentido la necesidad de correr. De parar el mundo. Pero alguien se habrá dado cuenta de su luz y de su bonita sonrisa. Unas manos extrañas la habrán tocado justo donde yo lo hice. Una voz desconocida le habrá susurrado te quiero al oído. Y todo lo cerca que estuvimos nosotros se habrá desvanecido entre sus nuevos recuerdos, como el humo de un cigarro. Pero este momento nos pertenece a ella y a mí, como antaño, cuando me parecía impensable pasar ni un solo segundo sin ella. Nos miramos. Un abismo nos separa, no somos los de antes, la vida nos ha cambiado. Y pienso en todo aquello que he estado pensando, lo que me juré le diría. Y lo pienso y lo repienso. Pero las cosas no salen, las palabras se quedan atascadas en mi boca. En este momento todo lo que cuenta son los actos. Así que me acerco a ella y la abrazo, sintiendo su cuerpo con el mío, recordando los tiempos en los que los abrazos eran continuos, y luego los besos. Pero dos años son mucho tiempo para romper una rutina. Nos separamos rápidamente, incómodos, sintiendo los antiguos recuerdos. Y entonces, empezamos a hablar. Una conversación banal, marcada por las referencias al pasado. Pasamos un buen rato andando, caminando por París. Esa ciudad en la que las casualidades no existen. Todo es producto del amor. Ya entiendo porque es la ciudad del amor. En un momento dado, ella me invita a ir a su casa. Llegamos rápido y me siento en su sofá. Se ahueca el pelo, inundando la habitación con su olor. Bebo un sorbo de la bebida. Me deja un regusto seco, pero me gusta. Y los minutos pasa, convirtiéndose en horas mientras nuestra conversación se adentra en terrenos peligrosos. Lentamente, mientras me explica el porqué de su cabello rubio, se va acercando a mí. Esto empieza a tener un tinte peligroso, pero me da igual. No puedo apartar mis ojos de sus ojos castaños, sintiendo su respiración en mis labios. Y entonces ocurre lo inevitable. Me sorprendo a mi mismo respondiendo al beso. Cómo sí de una película se tratara, veo aparecer todos nuestros recuerdos mezclados con otros nuevos. Pero mi culpabilidad desaparece. Siento que las palabras se quedan cortas. Y lo único que quiero es que trate de entenderme,  que consiga descifrar todo lo que le quiero decir con este beso. Esta es la última noche que estará sola. El beso se hace más apasionado y lento. Mírame a los ojos para que veas que yo lo sé. Mi camisa cae, luego la suya. Estoy en donde sea que tu quieres que este. Nada nos separa, después de tanto tiempo sin ella. Te sostendré en mis brazos y no te dejaré ir. La luz se apaga mientras nosotros vamos hacia su cuarto. Soy todo lo que necesitas que sea. Enredados en el beso, en las cenizas de nuestro amor. No te dejaré decir adiós. Sólo París puede ver nuestro error. Seré tu razón por que. Y ahora me doy cuenta. La última noche que tu estarás sola. Que un fuego no mata a otro, sólo lo aviva. La última noche lejos de mí.






                                                                             Lejos de mí.

27 ene 2012

Cap-58: Es lo último que te pido

Holaa! Bueno siento deciros que este es mi último capítulo. Quiero hacer un epílogo y eso pero no sé a ver sí lo escribo ahora. Ah y también voy a poner un pequeño agradecimiento y todo eso. Así que allí os diré todo lo que tengo que decir. Un beso y espero que os guste.
Narrado por Gin


1 día antes
Inspiro suavemente. Voy a echar de menos este olor. El dulce olor a sal, a mar. Uno de mis favoritos. Pero no es lo que echaré más de menos. Intento no pensar en eso, sólo conseguiré ponerme a llorar. Me siento suavemente en un banco. Veo las inscripciones que hicimos en él. Las acaricio con un dedo. Espero no olvidar eso nunca, nunca me perdonaría sí olvidara algún detalle de estos 7 meses. Mi vida cambió en cuanto lo conocí. Y no sólo porque pasé del anonimato a ser mundialmente conocida, sí no porque él me cambió. Miró su figura llegar hasta mí con una medio sonrisa. Sospecha algo. No puedo evitar sonreír, le amo con todo mi corazón, pero ahora eso no cuenta. Se sienta a mí lado y me acaricia el pelo.
-¿Qué hay cariño?- Me saluda dulcemente. Intento que no me vea los ojos mojados. Pero no lo consigo. Él me coge de la barbilla y me mira directamente a los ojos.
-¿Qué va mal?- Me dice cogiéndome la mano. No puedo evitar empezar a sollozar. Me abrazo con fuerza a él. Soy incapaz de mirarle a los ojos. me separa de él suavemente y me mira a los ojos. Intuye lo que le quiero decir.
-¿Sabes que?- me pregunta. Niego con la cabeza.
-Desde que estoy contigo, no soy el mismo. Antes tenía aficiones, gustos, pensaba en otras cosas. Pero desde que llegaste tú, sólo podía pensar en tí. ¿Cómo me has hecho esto? Y lo peor de todo es que me gusta. No quiero cambiarlo porque cada segundo que estoy a tu lado es como estar en el cielo. Y sé que tú eres mi vida, y el día que desaparezcas de mi vida, moriré-
-Justin...no lo hagas más difícil por favor- Le digo. Ahora sí que sabe lo que quiero. Me mira triste.
-No sabes lo que dices, ¿Quieres que te haga fácil dejarme cuando lo eres todo para mí?-
-Esto es tan doloroso para mí como para tí, yo no te quiero dejar, eres lo que más quiero, pero es lo que tengo que hacer-
-Pero sí te duele tanto, ¡No lo hagas!-
-Tú sabes que no podría funcionar, está muy lejos de aquí. Lo único que haremos es hacernos más daño, simplemente dejemoslo-
-Luchemos al menos por esto, no puede acabar así-
Ladeo la cabeza.
-lo siento, no podría soportarlo-
Justin me mira casi con lágrimas en los ojos. No soporto verle así.
-Pues entonces...¿nada?- Me pregunta. Le acaricio el pelo.
-Lo siento, sabes que te amo y que no haría esto sí no fuera necesario-

Ahora

Besos, abrazos, miradas de tristeza, esperanzas, palabras de amor. Eso es lo que me recuerda esta estación de trenes. No paro de mirar a todos lados, pero Justin no aparece. No le culpo, después de nuestra ruptura no querrá venir. Pero yo no soportaría irme sin verle. Sin ver a mi Justin, no a Justin Bieber sí no a mi Justin. Al que quiero. Mi padre entra dentro del tren casi sin despedirse de nadie. Cuando casi estoy a punto de entrar oigo a alguien gritando mi nombre. Me vuelvo y le veo. Ignorando lo que pasó ayer voy corriendo y le abrazo. Me gustaría poder trasmitirle con un abrazo todo lo que siento. No quiero irme, es lo que menos quiero, sólo le quiero a él, nunca fue mi decisión. Él parece comprenderlo porque me abraza más fuerte.
-Gin- Me susurra al oído. Le agarro con fuerza.
-Te traje un regalo para que no me olvides- Me dice con voz ronca. Le miro. No puedo evitar llorar. Me da una cajita con un colgante en forma de corazón. Le vuelvo a abrazar.
-Yo tengo uno también para tí- Le digo. Justin intenta sonreír. Puedo ver que está llorando. Abre mi regalo. Un album con nuestras fotos. Todas. Me abraza más fuerte. El pitido del tren indica que me engo que ir. Tantos sentimientos, tantas emociones, que no se pueden expresar con palabras. Me quedo con ganas de decirle algo.
-Te amo Justin- Le digo. Él me mira y sonríe.
-Y yo a tí Gin, más de lo que nunca he amado a alguien-
Otro abrazo.
-Supongo que es un adiós- Le digo.
-Sólo un hasta luego-
-Seguro que nos volveremos a ver-
-Te llamaré todas las semanas-
-Te enviaré e-mails-
Sonreímos. Me acompaña hasta la puerta y me abraza por última vez. Me subo al tren.
-Pase lo que pase, prométeme algo- Me dice de pronto. Le miro y asiento. Él mira hacia abajo.
-Dime-
-Prométeme que serás feliz- Me dice y entonces, las puertas se cierran. Me quedo mirándole, mirando como se derrumba mientras me alejo de él. Y en mi corazón todavía retumba lo que le he prometido en silencio. Sus últimas palabras. Seré feliz, por él.

13 ene 2012

Cap-57: Yo soy tú padre xD

Holaaa! ¿qué tal el nuevo añoo? Sé que tardo muchísimo en escribir, pero es que ya la inspiración se me ha ido DD: Y tengo que deciros que el próximo capítulo es el último:( Y que haré un  epílogo para más o menos explicar lo que les pasará y que será de su vida. Hace ya más de un año que estoy con esto y creo que sólo me leerán 3 o 4 personas que, aunque yo les agradezco mucho que me lean, siguen siendo muy pocas. Además, necesito escribir más cosas aparte de esto y sé que sí me pongo con dos cosas a la vez al final no haré ní una ní otra. Y tampoco sé sí poner en un blog lo próximo que escriba o no, es que va a ser algo especial, lo intuyo y no sé sí ponerlo o no. Bueno, ya lo decidiré y sé que me estoy enrrollando ya mucho ( como otros que yo me sé ¬-¬ jejeje) En mi canal de youtube seguiré colgando vídeos de Debby y Justin (canal- aniitasmiiley) y muchas gracias por todo, aunque esto todavía no es una despedida. Disfrutad el capítulo y besos (K.

Narrado por Justin
Ya hacen dos meses, pero no la veo mejor. Simplemente, intenta que no se le note, pero la conozco y sé que lo está pasando muy mal. En estos momentos son en los que más la debo apoyar. Le acaricio el pelo. No quiero que esté así, pero eso no lo puedo evitar yo. Le beso la frente. Simplemente estamos sentados en su cama, ella entre mis brazos, pequeña como siempre. Solos. No puedo evitar pensar en eso. Pero no es el mejor momento. Gin estornuda (o tosimentó, ¿no Lucía?) suavemente.
-Jesús- Le digo sonriendo. Ella me mira con sus dulces ojos castaños. Y no hace una sonrisa con sus labios, pero sé que está sonriendo, lo veo en sus ojos. Y veo más cosas, alegría, tristeza, deseo, y mucho, mucho amor. No puedo evitar sonreír. ¿Qué pensará de mis ojos? ¿Estoy cogiendo complejo? Seguramente, ella es tan perfecta y yo soy...soy yo. En ocasiones pienso que es demasiado perfecta para mí, y sé que suena a típico de libros en plan "Oh, no me la merezco" pero no, es verdad. Ella es tan perfecta...Ladea la cabeza y me mira dulcemente.
-Justin...- Me dice con voz débil.
-Dime cariño- le digo yo. Se estremece en mis brazos. Sonrío, lo había olvidado, ama que yo le llame cariño. Y yo amo hacerla feliz.
-Sabes que últimamente no lo estoy pasando bien...y que necesito distraerme ¿no?- me dice con voz melosa. Ya entiendo a lo que quiere llegar. Sonrío con dulzura. Le acaricio la mejilla.
-Pues dejame distraerte- le digo. Ella sonríe y la beso suavemente.

Más tarde

Nos sentamos a cenar en el salón con su familia. Desde hace un buen tiempo pasamos casi todo el día juntos, incluida la cena y la comida. Gin me sonríe dulcemente.
-¿Y qué habeis hecho esta tarde?- Nos pregunta su tía. Casi no puedo evitar la risa, pero Gin me pega un pisotón por debajo de la mesa. Compartimos una mirada significativa.
-Pues...dimos un paseo para tomar el aire, aquí dentro agobiaba mucho- Dice Gin. Lo que es verdad, pero no es todo lo que hicimos esta tarde. Sonrío. Su tía se da cuenta de que aquí pasa algo, pero no pregunta. De  pronto, llaman al timbre. Gin hace un amago de levantarse pero su tía la retiene.
-Da igual, ya voy yo- Dice con una sonrisa. Seguimos comiendo y hablamos de banalidades hasta que de pronto oímos que su tío discute con alguien a gritos. Gin se levanta y yo con ella. En la puerta hay un hombre alto que me suena de algo. Discute acaloradamente con su tía.
-Es mi hija Alessandra, y me la habeis estado ocultando todo este tiempo- Le dice él. Es alto con el pelo rizado oscuro y un marcado acento italiano. Las gafas que lleva sobre la nariz tiemblan levemente. Sus grandes ojos oscuros están marcados por las arrugas.
-Ella no quiere...quería que se viera marcada por un padre que la abandonó, es menos doloroso fingir tú muerte- Le dice ella.
-Yo no la abandoné, fue ella la que se fué, yo estaba en el ejercito ella sabía que no podía irme- Le dijo él.
-te pasabas todo el día fuera, y necesitaba dinero, y además ella nunca fue de permanecer mucho tiempo en un mismo lugar, pensaba que lo sabías Luca-
-Lo del pasado, pasado está. Ahora quiero ver a mi hija- Le dice él. Veo a Gin ponerse pálida. ¿Ese es su padre? ¿No estaba muerto? no entiendo nada. Gin se adelanta y su tía la ve.
-Vete para dentro Gin- le dice enfadada. Ella se queda mirando al desconocido y él a ella.
-Te pareces tanto a tú madre- Le dice él. Gin se acerca lentamente.
-¿Quién eres?- Le pregunta ella, aunque lo sabe perfectamente.
-Soy Luca Adornetto. Yo soy tú padre Gin-

3 ene 2012

Cap-56: Cosas irreversibles que duelen hasta quemar...


Holaaaaaaaa:) Gracias de todo corazón por estas 12000 visitas estoy realmente emocionada casi no me lo puedo creer. Sois los mejores y siento no poder continuar esta novela para siempre pero es que me falta inspiración y además quiero empezar otra a ver que tal se me da jajajaja Este capítulo sé que es corto pero es que no tengo ya tiempo para nada porque entre la tarea, un trabajo que tengo que exponer y salir y eso estoy falta de tiempo DD: Siento deciros que este es el 2 o 3 capítulo antes de que termine. Y siento lo triste que es este capítulo es que lo necesita. Adiiios besos y espero que lo disfruteiss y feliz naviidad y año nuevoo :)



Narrado por Gin
Me siento al lado de Justin y enciendo la tele con el mando. 
-¿Qué vamos a ver?- Me pregunta sonriendo. 
-Ni idea, elige tú- Le digo poniendo mi cabeza sobre sus piernas mientras le doy el mando. Justin me acaricia el pelo con dulzura mientras mira la tele. Le miro.  Parece concentrado, pero sólo parece. Hay que conocerlo muy bien para saber que está mirando la tele simplemente, sin verla realmente. Me preguntó que estará pensando. De pronto, se vuelve y me mira. me sonrojo, como sí hubiera hecho algo que no debiera. Justin me sonríe y me besa con dulzura. Me acaricia la cara con sus suaves manos mientras sigue sonriendo. Le miro con dulzura. Seis meses ya. Casi un año. Tantas cosas vividas. Cada vez estoy más segura que le amo de verdad. Él es mi vida. Mi tía entra. Justin y yo nos volvemos a mirarla. Tiene el teléfono en la mano y llora. Me levanto corriendo hacia ella. 
-¿Qué pasa?¿Estás bien?- Le pregunta preocupada. Ella me mira y empieza a llorar más fuerte mientras agarra el teléfono con fuerza. La ayudo a sentarse en el sofá.
-¿Qué pasa?- Le pregunto más preocupada aún. Ella sigue llorando con el teléfono aún en la mano. Justin me pone una mano en el brazo.
-¿está todo bien?- Me pregunta. Le miro con preocupación. 
-No lo sé, no me dice nada- Le digo con un timbre de ansiedad en mi voz. Justin coge el teléfono y escucha. Se pone serio de pronto. 
-Creo que deberías cogerlo- Me dice con voz serie y mirándome con preocupación. Cojo el teléfono con recelo y me lo pongo lentamente en la oreja. Sólo hay un pitido. Han colgado. Le miro con extrañeza. 
-¿Qué pasa? - Le pregunto por tercera vez a mi tía. Ella me mira. 
-Siéntate Gin por favor- Me pide mientras se seca las lágrimas con el dorso de la mano. me siento y Justin me da la mano trasmitiendome confianza. Mi tía toma aire.
-En ocasiones, Gin, pasan cosas que nosotros no tenemos la culpa. Cosas irreversibles que duelen. Puede que sientas que nadie te comprende, a lo mejor es verdad porque a pocos le pasa eso, pero quiero que sepas que estamos contigo en todo momento. ¿Comprendes?- Me dice. asiento levemente con la cabeza, no tengo ni idea de que está hablando. Mi tía vuelve a  tomar aire.
-Gin, tu madre ha...bueno que tuvo un accidente volviendo y...lo siento Gin- me dice. Entro en estado de shock. ¿Mi madre ha muerto? No me lo creo.
-¿Es una broma no?- Digo sintiendo las lágrimas quemando en mis ojos. Mi tía me mira durante un segundo pero luego esquiva mi mirada. Me echo dos pasos para atrás. No me lo creo. Todo esto es tan irreal. Me siento caer y alguien me recoje. Siento que Justin me abraza mientras yo me desmayo.

22 dic 2011

cap-55: Ella ❤

Holaaa;D


Narrado por Gin


Justin se queda mirándola, como sí no hubiera nadie más en el mundo. ¿Quién es? ¿De que la conoce? ¿Qué hace en su casa? demasiadas preguntas sin respuesta. Intento forzar una sonrisa, pero no lo consigo. Es como sí mis labios no se quisieran mover. Necesito hacer algo, moverme, gritar algo no sé, necesito que deje de mirarla así. La rabia me consume por dentro. Saboreo lentamente este sentimiento. Los celos. Nunca he sido una chic muy celosa pero es que hay algo en sus ojos que me hace desconfiar. Justin sigue todavía con su brazo sobre mis hombros, pero no me trasmite la seguridad de antes sí no que está así como sí me adornara. Ella me sonríe. La odio.
-Justin, menos mal que te encontré, tú madre te está buscando- Justin asiente sin decir nada con una expresión extraña en el rostro. Me da mala espina.
Horas más tarde
-Mira que eres tonto- Ríe tontamente Abbie.
-vamos la tonta eres tú que no te quieres enterar de nada- Sonríe Justin dulcemente. Apenas lo soporto. Sólo quiero largarme corriendo a llorar pero eso sólo le dará más satisfacción a Abbie. Caitlin me mira como sí supiera lo que estoy pensando. Necesito irme ya, no lo soporto. Abbie no ha parado de tontear con Justin desde que salimos, y lo malo es que él le hace caso. Y lo peor es ahora que estamos todos. Ella está sentada en su regazo mientras juguetea con su pelo. Casi no lo aguanto. Casi no, no lo aguanto. Me tengo que ir esto es insoportable. Reúno fuerzas y me levanto.
-Oye yo me voy a mi casa, que le dije a mi madre que la llamaría temprano- Digo, aunque todos menos Justin saben que es mentira. Justin tiene al menos la decencia de levantarse a despedirse de mí. Me mira con sus cálidos ojos miel.
-Adiós cariño, te llamaré luego- Me dice dándome beso leve en los labios. Sonrío como puedo y asiento, aunque la verdad no me lo creo mucho. Voy dándome la vuelta cuando alguien me agarra el hombro. Mi corazón se acelera, a lo mejor Justin se ha dado cuenta de que está actuando mal y querrá arreglarlo. Me vuelvo ilusionada pero me encuentro con Ryan. Me sonríe con calidez.
-Te acompaño ¿vale? - me dice. Me encojo de hombros, no me puedo negar. Empezamos a andar. Ryan suspira.
-Gin quiero que sepas que Justin no es así, todos nos hemos sorprendido por como se está comportando hoy- Me dice Ryan.
-Sé que no es así, pero...¿porqué está así con ella?- Le pregunto. Ryan me mira significativamente, no va a decirlo. Siento mis ojos llenarse de lágrimas.
-Entiendo, ya no quiere nada conmigo ¿no?- Le digo conteniendo las lágrimas.
-Eso no es seguro, pero me extraña que haya borrado de un plumazo todo lo que sentía por ti, realmente no le entiendo- Me dice con sinceridad.
-Yo menos la verdad- Le digo suspirando.
-Hablaré ahora con él, y ya te contaré ¿ok?- Me dice francamente.
-Muchas gracias Ryan- Le sonrío. Llego a la puerta de mi casa y nos despedimos.
Narrado por Justin
Llamo a su puerta y me abre su tía. Me saluda con calidez mientras me indica que está en su cuarto. Subo rápido y abro la puerta. Gin se gira con rapidez hacia mí. Me recuerda a la escena de una película, nos quedamos mirándonos durante varios segundos. Sus ojos se iluminan y viene corriendo a abrazarme. La abrazo con fuerza pero ella afloja el abrazo de pronto. Se separa de mí y me mira triste mientras se sienta sobre su cama.
-Justin quiero decirte algo- me dice con seriedad. Me siento a su lado.
-Dispara- Le digo mientras le aparto ese molesto mechón de la cara. Inspira profundamente antes de empezar a decírmelo. Sospecho lo que me va a decir.
-Mira, no sé como decírtelo, lo intentaré pero no te prometo nada- Me dice mordiéndose el labio. Siento como mi corazón comienza a latir irregularmente. No creo que vaya a hacerlo. Esta vez sí que no podría soportarlo. ¿Va a cortar conmigo? Por favor que no...
-Bueno, quería decirte...que...mira...sí ya no quieres estar conmigo, por favor dímelo...puedo entender que te hayas vuelto a enamorar...Es algo normal...pero por favor, no me mientas- Me dice bajando la cabeza dulcemente. Siento el alivio corriendo por mis venas de forma dulce y acariciadora. Sonrío. Con que sólo era eso. Le acaricio la mejilla con dulzura. Gin me mira con sus bonitos ojos.
-Sí, me he enamorado de una chica fantástica, llevamos juntos poco tiempo pero creo que es la chica de mi vida. Cada vez que la miro es como la primera vez, nunca me cansaré de estar con ella estoy seguro. Y sí, sé que hay chicas más guapas, pero su belleza es especial. Mucha gente duda de nuestro amor, pero yo pienso que es real y nunca dejaré que nada se interponga entre nosotros- Le digo. Sus ojos comienzan a llenarse de lágrimas. Parece que va a decir algo, pero yo le pongo un dedo sobre los labios- Esa chica se llama Gin Adornetto y confieso que estoy completa y perdidamente enamorada de ella-
Gin parpadea con sorpresa. Entonces, sonríe y me abraza con fuerza. Le acaricio el pelo mientras sonrío. Me coge la cara con sus suaves manos y me besa dulcemente.
-¿Sabías que eres un cielo de chico?- Me dice sonriendo feliz, no puedo evitar sonreír. No, no me arrepiento de nada. Apoyo mi frente con la suya mientras sonrío.
-Sí, me lo dicen muchas- Le digo sacándole la lengua. Gin finje enfado y me tira un cojín. Sonrío más ampliamente. Pongo el cojín al lado mía.
-Es que soy tan adorable- Le digo encogiéndome de hombros. Gin sonríe.
-Tú abuela bien ¿no?- Se ríe. Sonrío y la beso suavemente, de nuevo, inesperadamente, con ganas y como siempre, enamorado de ella. De su risa, de su voz, de su sonrisa, de sus enfadas, de sus tonterías, en fin, de ella.❤ 

9 dic 2011

Cap-54 : Problemas de confianza (Trust issues)

Holaaa honney´s :D Bueno sólo deciros que espero que os guste este capítulo, esta vez me he dado más prisita porque es que voy muy atrasada...xD Y una cosita más, creo que pronto dejaré esta novela. Sí, queda como mucho 5 o 6 capítulos, no quiero hacer más porque siento que me esstoy enrrollando mucho y que ya casi nadie me lee y bueno...creo que empezaré otra que llevo unos cuantos días perfilando y deciros que os quieroo y que muchas gracias por leer que sois lo mejor que hay y que espero que no os enfadeis conmigo por esto. ¡Un beso!

Narrado por Justin

Alguien me llama. Sin volverme sé quien es. Pero, para asegurarme, me vuelvo. Y me vuelvo a cruzar con esos ojos azules, que tantos secretos y promesas contienen en ellos. La tentación personificada, pero con otro nombre. Abbie.
Varias horas atrás
-Porque le he pedido que se case conmigo- Le digo sin pensar. ¡Zaas! Mi madre me pega una torta. Me llevo la mano a la mejilla dolorida. Mamá se lleva las manos a la boca, pero no me dice nada. Me levanto de golpe, dando por terminada la conversación. Subo a mi cuarto. Me siento en la cama mientras me pongo los cascos. Le doy al play y empieza "Trust issues" de Drake. Apenas oigo la canción. En la vida me ha pegado, en la vida. No es de ese tipo de madres. Pero hoy...No lo entiendo. ¡Joder, es mi madre! Llaman a la puerta. No contesto, después de lo que ha pasado no me voy a quedar igual. Abre la puerta. Miro a mi madre de reojo mientras se sienta a mi lado.
-Justin- Me llama. Me quito los cascos y la miro seriamente. Se retuerce las manos con apariencia nerviosa.
-Sé que me he pasado, pero entiende que ha sido un duro golpe para mí- Me dice con cara arrepentida.
-Compréndeme tú a mí, para empezar no confias en Gin y me pegas cuando te digo que me quiero casar con ella- Le digo serio. Se le humedecen los ojos y no puedo evitar sentirme mal. Es mi madre, siempre ha sido una persona fuerte pero ahora parece muy frágil.
-Es duro ver a tu hijo cometer los mismos errores que tú- Me dice secándose los ojos.
-Pero lo nuestro no es un error, nos queremos y eso es lo que importa- Le digo mirándola fijamente. Mi madre sonríe levemente.
-No siempre las cosas salen como quieres, puede haber algún pequeño error que lo eche todo a perder, y entonces te arrepentirás toda tú vida...-Dice con la mirada perdida en el horizonte.
-Pero...yo siento que es la chica con la quiero pasar el resto de mi vida-
-Bueno...pero es no va a hacer que confie más en ella-
-Pues, entonces, ya no sé como hacerte cambiar de opinión-
Mamá sonríe y me acaricia el pelo.
-Me fio de tí, pero de ella no- Me dice abrazándome- Tengo miedo de que te haga daño-
-No me lo hará, la conozco muy bien- Le digo con firmeza.
-Bueno...-
Y de pronto suena el timbre. Mi madre sonríe, esta vez de verdadera alegría. La miro con curiosidad.
-¿Esperas a alguien?- Le pregunto. Mamá asiente con la cabeza mientras sonríe.
-Se llama Alec, es mi novio- Me dice con cierta timidez. Sonrío.
-Eso es...¡maravilloso!- Le digo sonriendo ampliamente. Mi madre me abraza con fuerza y un segundo más tarde está saliendo de mi cuarto con la misma rapidez con la que yo voy a ver a Gin. Sonrío. Me tumbo de nuevo en mi cama. Miro el techo. Pienso en lo que ha pasado en las últimas 24 horas. Gin y yo hemos vuelto. Con lo que siento que puedo volver a ser feliz de nuevo. Y luego perdí mi virginidad con ella. Sonrío. Eso sí es ´difícil de asimilar. Casi no lo creo. Es en plan ¿Ha pasado de verdad? Porque es un concepto que no me llega, es decir, que no lo asimilo. Lo que sí puedo jurar que recuerdo con claridad, fue lo que sentí. Jamás estuvimos tan unidos, aunque sólo fuera físicamente. En serio, no fue sólo lo físico si no lo sentimental. Sacudo la cabeza. A veces siento, que cuando estoy con ella, hay otro Justin, uno con el que me encuentro más a gusto, más agradable, más atento y sobre todo, uno que sólo piensa en una cosa: Gin. Desde que llegó a mi vida, han camiado muchas cosas. Creo que es la única persona que he conocido siendo famoso que me trata más como Justin que como Bieber, que es capaz de ver más allá de esa máscar comercial. Mi madre me llama. Seguramente para presentarme a su novio. Me alegro de que haya encontrado a alguien, la veía muy sola. Bajo aún con la sonrisa en los labios. Tarareo una canción entre dientes mientras llego. Miro hacía donde está mi madre, y hay algo que no me cuadro. Ahí hay dos personas más. Está un hombre alto que parece fuerte, con unos profundos ojos azules y el pelo moreno claro. Mi madre habla animadamente con él mientras él la mira fijamente mientras sonríe. Trasmiten mucho amor, me pregunto sí Gin y yo también somos así. No sé. Acto seguido su acompañante se vuelve. La miro. Es muy guapa, no puedo evitar pensar. Es alta y morena con el pelo suavement lacio. Me mira con unos profundos ojos azules que parecen llegar al alma y ver todo lo que siento. Sin embargo, no me incomoda. Sonríe, es muy guapa, no como Gin si no difernete. La belleza de Gin es más dulce y tierna mientras que la de ella es como delicada, como sí hubiera sido pintado por un pintor de gusto exquisito. La mira un rato más, no, no es tan guapa. Tiene los ojos ligeramente caídos y la nariz rara. Gin es mucho más guapa, pero ella tiene algo que me atre a la vez que me aleja. Es extraño.
-Justin, esta es Abbie, la hija de Alec- Me dice mi madre mientras Alec le pasa el brazo por la cintura. Me acerco a darle dos besos y siento un mechón de su pelo rozándome la cara.
-Encantada- Me dice Abbie con una melodiosa voz. Y me siento extrañamente nervioso, como sí sólo el leve sonido de su voz me advirtiera de que hay algo malo.

30 nov 2011

Cap-53: Hasta el matrimonio

Sientoo no escribir más a menudo pero es que no me da más tiempo, en serio. Con los examenes y todo eso D`: Así que espero que este os guste :DD


Narrado por Gin
Los primeros compases de la canción llenan mis cinco sentidos. Me encantaría poder tocar el piano. Y empieza la parte de cuerda. Me gusta mucho esta canción. Es algo triste pero muy bonita. El cantante comienza a cantar y consigue situarme en esa pelea. Sólo con unas cuantas palabras y una dulce voz. Pero ya es demasiado tarde para estar arrepentida, dice el cantante. Y suena mi móvil. Un mensaje. De Justin seguro. Sonrío. Efectivamente, es de él. Me quito los cascos y salgo a verle. Ahí está. Está sentado en el suelo y parece cansado y triste. Me acerco a él tímidamente. Justin me mira y sonríe, pero la sonrisa no llega a sus ojos.
-Justin, ¿Qué te pasa?- Le pregunto preocupada. Justin sacude la cabeza.
-Nada, ¿porqué?- Dice de manera poco convincente. Me cruzo de brazos.
-Justin...-Le digo con retintín. Justin suspira.
-Mi madre se ha enfadado conmigo- Me dice mientras se toca el cuello, incómodo. Mi intuición me dice que no debo preguntar porqué, pero mi curiosad puede.
-¿Y eso? Con lo bien que os llevais- Le digo cogiéndole la mano suavemente.
-Por tí- Me dice simplemente mientras me mira intesamente. Me llevo las manos a la boca mientras habro los ojos mucho. Justin se acerca a mi cara y me acaricia el pelo mientras me mira con dulzura.
-Dice que...sólo me quieres por mi fama- Me dice triste. Le miro sorprendida.
-Eso es mentira. Sí fuera verdad, ¿Me habría peleado contigo?¿Habría tenido mi primera vez contigo?¿Habría...-Pero Justin me pone un dedo en los labios y sonríe.
-Eso ya lo sé princesa, pero mi madre no te conoce tan bien como yo lo hago- Me dice con una sonrisa. Justin retira el dedo y me besa con suavidad y dulzura. Le acaricio el pelo con los dedos y Justin me coge la cara con una mano. De pronto, y sin previo aviso, salta a mi balcón. Apoyo mi frente sobre la suya, mientras nuestras narices se rozan. Siento su aliento sobre mis labios. Justin sonríe. ¡Bésame! Se acerca a mí tanto, que nada nos separa. Todo mi cuerpo quiere estar más cerca aún. Justin sigue sin rozar mis labios, pero consigue que me muera por hacerlo. Pero no voy a ceder. Sí él quiere algo que lo venga a buscar. Justin me mira con sus cálidos ojos cafè mientras sonríe. Me coge la cintura con suavidad mientras frota su nariz contra mi mejilla. Sin quererlo mi respiración comienza a descontrolarse y Justin lo nota.
-Te veo nerviosa princesa- Me dice sonriendo pícaramente. Me separo de él y le pego en el brazo.
-¡Au! Para ser una chica pegas fuerte- Me dice haciéndose el dolorido. Le miro mal.
-Te lo mereces y como sigas quejándote te doy otra ¡eh!- Le digo finjiendo enfado.
-No, no, con una es más que suficiente- Me dice. Sonrío.
-¡Qué tonto eres!- Le digo con una sonrisa.
-¡Qué bruta eres!- Me dice Justin imitándome. Finjo enfado.
-No me imites- Me quejo. Justin sonríe ampliamente.
-Oye que tù me has llamado tonto- Se queja él. Vuelvo a sonreír.
-¿Paz?- Le digo tendiéndole la mano. Justin sonríe pícaramente.
-¿Sólo un apretón?-
-Sí, ¿Qué esperabas?-
Justin vuelvo a sonreír pícaramente.
-Un beso- Dice poniendo cara de inocente.
-Un beso cuando te lo merezcas y por ahora no- Le digo sacándole la lengua.
-Oh, vamos, sí tienes tantas ganas como yo- Dice rodando los ojos. Sonrío.
-Después de lo de ayer me voy ha mantener casta y pura hasta el matrimonio- Le digo intentando mantener la risa. Justin enarca una ceja.
-¿En serio?- Me dice riéndose.
-Sip- Le digo desafiante.
-¡Pero sí te vas a casar conmigo!- Se queja como un niño pequeño.
-Yo todavía no he decidido nada-
-Pero sabes que es verdad-
-Anda cállate tonto-
Y me besa de improvisto. Abro los ojos y sonrío suavemente. Justin me acaricia la mejilla suavemente, con dulzura. Pero, me separo suavemente de él.
-Hasta el matrimonio- Le recuerdo. Justin frunce el ceño.
-Pues cásate ahora mismo conmigo, porque no puedo soportar el no tocarte hasta dentro de 5 años o así- Me dice exasperado.
-Ah, se siente no haber salido conmigo- Le digo sonriendo.
-Joe, eso sería mucho peor. No te podría ni ver-
Pos se siente, además ¿Tú no tenías un "nosequé" de castidad?-
-Si, el anillo de castidad, que es lo de no hacer el amor con nadie a quien no quisiera de verdad-
-Ahh pues eso-
-Pero sí yo te quiero cariño-
-Demuéstramelo-
-Te pedí que te casaras conmigo-
-Excusas excusas-
-Que te quiero de verdad princesa-
-Te lo crees todo, era broma-
Sonrío mientras le pongo los brazos al cuello. Justin apoya su frente contra la mía.
-¡Qué mala eres!- Me susurra. Sonrío.
-Lo sé- Digo simplemente. Justin enreda sus dedos en mi pelo mientras sonríe dulcemente. Me siento incapaz de pensar en algo que no sean sus labios. Justin me mira fijamente con sus cálidos ojos oscuros. Sigue sonriendo mientras su mano pasa de mi pelo a mi mejilla. Y entonces pasa como a cámara lenta. Se va acercando a mí hasta que sus labios rozan los míos. No puedo evitar volver a sonreír. Sus labios acarician los mío con suavidad y dulzura. Pero de pronto...
-Justin, ¿donde estás?- Pregunta una suave voz femenina que no consigo reconocer.

11 nov 2011

Cap-52:Tú no la conoces

Hoolaaa Sientoooooo en el alma el haber tardado tanto DD: Pero aquí está el capítuloo!! Espero que os gustee:D


Narrado por Justin
-Gina Marie Adornetto, ¿te quieres casar conmigo?- Le digo impulsivamente. Gin abre mucho los ojos.
-¿Qué? Será una broma ¿no?- Me dice Gin en shock.
-Voy totalmente en serio- Le respondo acariciándole la mejilla suavemente. Gin me mira sorprendida.
-Pero Justin, ni siquiera hemos cumplido los 17- Me dice mirándome con sus bonitos ojos castaños.
-¿Y? Sé que quiero pasar el resto de mi vida contigo- Le digo encogiéndo me de hombros.
-Pero yo quiero a la universidad y sacarme una carrera, además a tí todavía te queda mucho de ser famoso- Me dice.
-No te pido que nos casemos mañana, si no que lo dejemos para más adelante- Le digo intentando que la decepción no se cuele a través de mis palabras, pero Gin me conoce muy bien.
-No es que no quiera, me encantaría, pero me parece muy precipitado. Entiendeme por favor- Me dice cogiéndome la mano.
-Quizás sea pronto, pero Gin te quiero mucho y no quiero volver a perderte nunca más- Le digo mientras la abrazo fuerte. Gin me abraza a su vez.
-Eso no volverá a pasar- Me dice Gin al oído. Me separo y la miro. Le aparto el pelo de la cara mientras miro sus grandes ojos chispeantes. Le cojo la cara con suavidad mientras me voy acercando a ella suavemente. La beso en los labios dulcemente.
-Sólo déjame pensarlo- Me dice Gin un segundo antes de besarme con dulzura. Apoyo mi mano en la curvatura de su mandíbula mientras que con la otra sujeto su pequeña cintura. Me separo lentamente y la miro. Gin ladea la cabeza. Y vuelvo a sentir ese calor en mi pecho que me dominó ayer, pero casi imperceptible.
-¿Ya lo has pensado?- Le pregunto riéndome suavemente. Gin rueda los ojos.
-Tú beso no me ha hecho cambiar de idea- Me dice rodando los ojos. Finjo enfado.
-No puedes negar que te ha gustado- Le digo bajando del coche.
-Tss los ha habido mejores- Me dice imitándome. La miro mal y Gin me mira con carita de perrito abandonado. No puedo resistir las ganas de abrazarla.
-Tranquila que habrá tiempo suficiente para hacerte cambiar de idea-Sonrío mientras llamo al timbre. Caitlin abre a los dos minutos y se nos queda mirando con cara rara. Gin sonríe.
-¿Pero no habíais cortado?- Nos pregunta extrañada.
-Sí, pero hemos vuelto- Sonríe Gin. Está radiante. Hacía tiempo que no la veía así de feliz. Caitlin nos mira sorprendida.
-Bueno, pasad- Nos dice.

Cojo a Gin por la cintura y entramos. Caitlin cierra la puerta.
-Tía ¿Dónde has estado esta noche? Que te estuve esperando- Le dice Caitlin a Gin. Gin vuelve la cara hacia mí y me sonríe mientras compartimos una mirada llena de complicidad. Caitlin intenta descifrar nuestra mirada.
-Es una historia muy larga de contar- Dice Gin tocándose el pelo incómoda. Caitlin gesticula con los labios, cosa que sólo hacen las chicas y Gin sonríe.
-Tengo tú ropa aquí, vente a cambiarte- Le dice Caitlin. Gin asiente.
-Chris está en el salón jugando a no sé que- Me dice Caitlin mientras Gin se separa y sube con Caitlin. Voy hacia el salón. Desde ayer por la noche hasta ahora no me arrepiento de nada. Sonrío. Llego al salón y veo a Chris.
-¿Qué pasa bro?- Le saludo. Chris me saluda y me siento a su lado. Juega a fútbol, como no.


-¿Has vuelto con Gin?- Me pregunta Chris. Sonrío.
-Al final sí, ayer cuando me fuí- Le digo. Ya la echo de menos. Echo de menos su manera de iluminar la habitación con su sonrisa. Su cuerpo pequeño junto al mío. Su mano entrelazada con la mía.
-Me alegro bro, lo has pasado bastante mal ese tiempo que pasasteis separados. Te lo mereces- Me dice Chris. Le miro diferente. Pienso en algo que decirle y aparece Gin. Está tan guapa en un vestido como en vaqueros. Me mira y sonríe mientras se pone un mechón detrás de la oreja. Se sienta a mi lado y me coje la mano. Caitlin se acerca a mi y me dice al oído:
-Bonita forma de reconciliaros-
La miro mal y ella se ríe.
-Chris tío no seas autista y apaga la consola- Le dice Caity riéndose.
-Un segundo - Dice Chris. Me río.
-Bro estás completamente enganchado- Le digo riéndome.
-Venga Gin quejate tú también de mí- Le dice Chris. Gin se ríe.
-Ay que ver Chris, tus amigos aquí y tú jugando a la consola, verguenza, verguenza debería darte- Le dice Gin sonriéndo.
-Es que este juego engancha, probarlo vosotros- Dice Chris mientras apaga la consola. Caitlin rueda los ojos y Gin ríe. Le paso el brazo por los hombros y le acaricio el pelo.
-¿Y vuestros padres?-Pregunto.
-Están trabajando en la tienda, se pasan todo el día allí- Se queja Chris. Caity le pega un empujón de broma.
-No te quejes enano, que al menos estamos solos más tiempo- Le regaña Caity. Chris le mira mal.
-Porque eres una chica que sí no te la llevabas- Le dice Chris picado. Sonrío. Miro a Gin mientras Caity y Chris se empiezan a pelear.
-¿Porqué se lo has dicho?- Le pregunto aparentando enfado. Gin encoge de hombros.
-Es mi mejor amiga, debe saberlo- Me dice sonriendo- ¿Tú no se lo has dicho a Chris?-
-No, no me ha dado tiempo- Sonrío mientras le acaricio la mejilla. Gin sonríe.
-Pues cuando quieras fardar se lo puedes decir- Me dice Gin sonriendo. Sí es que aunque lo intente, que no lo hago, no puedo dejar de quererla. Se hace querer. De pronto, mi móvil vibra. Mierda. Mi madre.
-Un momento, es mi madre- Me disculpo con una sonrisa. Gin sonríe y va a mediar entre Chris y Caity.
-¿Sí?- Le digo.
-Justin ¿Dónde estás?- Me pregunta mi madre con ese timbre de voz que tiene cuando está preocupada. Sonrío.
-En casa de Chris- Le digo.
-¿Y qué haces allí? ¿Te puedes hacer idea de lo preocupada que estaba por tí?-Me grita.
-Tranquila mamá, en dos minutos estoy allí, te lo prometo-
-Màs te vale Justin Drew, màs te vale-
Y cuelgo. Mi madre es siempre tan oportuna. Vuelvo con Gin.
-¿Qué pasa?- Me pregunta preocupada.
-Me voy cariño, te llamaré esta tarde ¿Ok?- Le digo echándole el pelo hacia atrás. Gin sonríe tristemente y se levanta conmigo.
-¿Te vas ya?- Me pregunta triste. La beso suavemente. Me separo y me quedo mirándola a sus preciosos ojos. Suelen decir que los ojos son las ventanas del alma, pienso que tienen toda la razón. Me encantaría parar este momento y que dure para siempre. Pero, al parecer, todos están en contra. Sonrío y le beso la frente.
-No te olvides de pensarlo- Le recuerdo esbozando una sonrisa pícara. Gin sacude la cabeza y sonríe.
Media hora después
-Pero mamá, yo la quiero- Le grito a mi madre. Ella suspira exasperada.
-No lo entiendes, sólo te está utilizando para tener fama- Me dice llevándose una mano a la frente.
-No la conoces, Gin no es así- Le grito de nuevo. Es la primera pelea seria que tengo con mi madre. Y es por culpa de mi madre. No la conoce. Sí lo hiciera vería lo maravillosa que es. Pero no quiere hacerlo.
-¿Y tú sí?-
-Pues claro, es mi novia-
-¿Y cómo sabes que no hay una parte que te está ocultando?-
-¿Quieres saber porqué?¿De verdad?-
-Me encantaría-
-Porque le he pedido que se case conmigo-

23 oct 2011

Cap-51: Porque cada vez que sonríes veo fuegos artificiales❤

Hoolaaa:DD La semana pasada no puse ningún comentario de lso míos, pero es que estuve ocupada y lo subí en el momento libre que tuve :( Bueno el capítulo se llama así porque una canción de la Oreja de Van gogh se llama L primera versión y habla de "eso" así que...Let be rocking! ok, no xDD
Bueno este nombre tiene su explicación y es que hay una parte en inglés que dice Gin y significa eso❤ No os entretengo más, disfrutadlo! ❤
 
Narrado por Gin
Abro lentamente los ojos. Me duele todo. Miro hacia arriba, pero esta no es mi habitación ¿Dónde estoy estoy? Y entonces me acuerdo de lo que pasó ayer. Me sonrojo entera y mira hacia el lado. Y veo a Justin dormido. Sonrío, se ve tan dulce durmiendo. Pienso en como le he echado de menos. Y por fin estamos bien. Le acaricio la mejilla y le aparto el pelo de la cara. Justin abre los ojos y me sorprende. En cuanto me ve sonríe.
-Buenos días cariño- Me dice sonriendo. Le sonrío.
-Hola Justin- La saludo. Se incorpora y me mira. De pronto, me abraza fuerte.
-Que sepas que lo de ayer también fue muy especial para mí- Me dice al oído. Me vuelvo a sonrojar. Le abrazo fuerte. Y no sé como acabamos llegando a los labios. Le beso dulcemente. Justin sonríe. Roza su nariz con la mía y apoya su frente sobre la mía mientras me mira a los ojos.
-¿Qué hacemos hoy amor?- Me dice con una preciosa sonrisa. Siento que voy a hiperventilar mientras mi corazón va a 100 por hora. Justin sigue sonriendo.
-Supuestamente yo tendría que estar en casa de los Beadles, le dije a mí tía que me quedaba a dormir allí- Le digo acariciandole el pelo.
-Pues sí quieres nos acercamos por allí- Me dice con voz dulce. Sacude la cabeza para ponerse el pelo bien y se levanta. Coge la ropa y se la pone, mientras intento no mirarle demasiado. Cuando ya se ha vestido me mira significativamente.
-Justin no me mires que me da vergüenza- Le digo sonrojandome. Justin rueda los ojos y se da la vuelta.
Sonrío y me aseguro de que no ve nada. Cuando termino le abrazo por detrás. Justin se da la vuelta y sonríe. Me mira con dulzura y entierra la cabeza en mi pelo.
-Te he echado mucho de menos- Me dice. La abrazo más fuerte.
-Yo también a tí- Le digo mientras acaricio su sedoso pelo con mis dedos. Justin se separa lentamente mientras me mira. Y sonríe. Mi corazón vuelve a latir con fuerza. Entrelaza sus dedos con los míos. Cojo las pocas cosas que llevaba y salimos. Justin me vuelve a ayudar a bajar, ¡qué mono! El suelo está mojado habrá llovido mucho esta noche. Justin me mira y se pone a pensar.
-¿Qué estás pensando Justin?- Le pregunto sospechando de él. Justin se ríe.
-¿Yo? Nada, nada- Me dice sonriendo. Me paro y pongo los brazos en jarras.
-Justin...- Le digo levantando las cejas. Se vuelve a reír.
-Bueno pensaba en esto- Me dice cogiéndome en brazos. Pego un grito de sorpresa y él se ríe aún más fuerte.
-¡Justin! !Bájame por favor!- Le grito. Justin me mira profundamente.
-Lo siento, no negocio. Te he secuestrado- Me dice intentando aguantar la risa. Le dirijo una mirada significativa. Justin se encoje de hombros y esboza esa sonrisa pícara que tanto amo. Ruedo los ojos.
-Bueno como quiera usted señor secuestrador- Le digo resignada mientras me agarro a su cuello.
-Así me gusta, preciosa- Me dice. Ladeo la cabeza.
-¿Peso mucho?- Le pregunto porque no le veo cansado. Justin sonríe ampliamente.
-Que va, apenas me cuesta llevarte- Me dice. Estoy segura de que miente. Sólo me dice eso para que me sienta bien. Por fin llegamos a su coche. Justin me deja en el suelo y me abre la puerta.
-Gracias señor secuestrador- Le digo dedicándole una de mis mejores sonrisas. Justin da la vuelta y empieza a conducir.
-¿Pongo la radio?- Me pregunta mientras arranca.
-Por favor:) - Le digo. Justin sonríe. Y empieza a sonar una de mis canciones favoritas.
-Drop everything now, meet me in the full of rain, kiss me sidewalk take away the pain. Cause´ I see sparks fly whenever you smile ♪- Canto a gritos. Justin me mira y sonríe. Sigo cantando hasta que termina.
-¿Qué canción era?- Me pregunta curioso.
-Sparks fly de Taylor Swift- Le digo con una sonrisa. Justin me guiña el ojo.
-Ahora me toca a mí- Me dice mientras empieza a sonar los primeros compases de la canción. No sé cual es.
-Can you be my doctor? Can you fix up? So rocking. I just wanna make you sweat (He acortado la letra porque no me la sé y la estoy poniendo de oído xP)- Canta Justin mientras mira la carretera.
-¿Cuál?- Le pregunto extrañada. No la he escuchado en la vida.
-¿No la conoces? Es la de Sweat de David Guetta y Snoop Dog- Me dice sorprendido.
-Ahora los dos- Digo. Y suena la canción de Move like Jagger. Y así hasta que llegamos a casa de los Beadles. Cuando voy a abrir la puerta para bajarme Justin me coge del brazo.
-Gin, ¿Te puedo preguntar algo?- Me dice serio. Me preocupo.
-Claro, Justin lo que sea- Le digo intrigada. Justin toma aire, me mira a los ojos y me dice:
-Ginna Marie Adornetto ¿Quiéres casarte conmigo?-
___________________________________________________________________________________

Sí quereis oír las canciones son estas:
Moves like jagger- http://youtu.be/iEPTlhBmwRg

❤❤❤

17 oct 2011

Cap-50: La primera versión

Narrado por Justin
Aparto una rama con toda la suavidad que me es posible. Mi corazón late desbocado. Intento mantener la calma, pero no puedo. Quizás lo consiga hoy, quizás me perdone, quizás todo vuelva a ser como antes. Sólo con pensar en eso se me pone una sonrisa tonta en la cara. Pero no debo ilusionarme, sno lo he conseguido todavía ¿Qué me hace pensar que lo conseguiré hoy? Por fin llego, pero no la veo. Siento como sí todo se derrumbara. Ian me ha mentido. Me doy la vuelta para irme y oigo un estornudo. Mi corazón se enciende. Me doy la vuelta de nuevamente con lentitud. Y ahora la veo.Siento como sí todo se parara y sólo estuviera Gin. Me acerco lentamente y me siento a su lado. Gin me mira lentamente.
-¿Qué haces aquí?- Me pregunta.
- He venido a mirar las estrellas- Le digo suavemente aunque es mentira.
Gin se levanta y hace amago de marcharse. Le cojo del brazo con suavidad. Vuelve la cabeza hacia mí sorprendida y compartimos una dolorosa mirada. 
-Déjame irme, por favor- Me dice sin odio alguno por primera vez en dos semanas. Eso me hace vacilar, pero no me voy a rendir.
-No puedo-Le digo suavemente. Gin suspira.
-Justin...-Dice solamente.
-Gin...no sé como decírtelo ya, te quiero, eres lo mejor que me ha pasado nunca y aunque no lo creas, esto me duele tanto como a tí- Le digo acercandome a ella.

Gin se queda quieta mrando al suelo. Siento unas ganas incontenibles de abrazarla. Pero me aguanto. 
-Después de lo que ha pasado me cuesta mucho creerte- Me dice.
-Lo sé pero Gin yo nunca quise besarla, ella se me echó encima ¿Entiendes?- Le digo con suavidad. Gin levanta la cabeza y me mira profundamente. 
-Claro, lo entiendo, entiendo que eres como el resto de los tíos que van de tía en tía como de flor en flor- Me dice. La miro sorprendido.
-Tú sabes que no soy así, Gin me conoces como nadie lo ha hecho nunca- Le digo intentando poder volver a tener una oportunidad.
-Creí que te conocía, pero en realidad eres un completo desconocido para mí- Me dice. Toma aire profundamente y añade como sí eso lo aclarara todo- Te oí ayer hablando con Ryan-
Gin se da la vuelta y empieza a andar como para irse. Tomo aire. 
-No hablaba de tí Gin- Le digo ya desesperado. Gin sigue andando sin volverse. 
-Hablaba de Kylie, mi ex-novia- Le digo de pronto. Gin se gira un segundo, lo justo para ver que ha vacilado. La alcanzo.
-Gin, por favor, te necesito más que al aire, no me dí cuenta de lo que tenía y ahora me arrepiento con toda mi alma- Le digo cogiéndole una mano. 
-Justin, No te das cuenta ¿No? No te das cuenta de todo el daño que me has hecho, no, claro que no, tú sólo piensas en tí mismo y en lo que te ha dolido, ¿y yo qué?- Me dice enfadada.
-Gin, nunca he dudado del daño que te he hecho, jamás. Pero tienes razón, soy muy egoista y lo único que quiero es tenerte como antes, sin importar lo que he hecho- Le digo bajando la cabeza. Eso mina sus defensas. La veo derrumbarse. Y no puedo evitarlo. La abrazo con todas mis ganas. Gin trata de desasirse de mi abrazo, pero acaba cediendo. Sonrío. Necesitaba tanto abrazarla, necesitaba sentir su pelo suave contra mi mejilla, poder coger su cintura con suavidad, sentir su pequeño cuerpo contra el mío, lo neceitaba tanto...no me puedo creer que este ocurriendo esto. Y llega un momento en el que Gin me abraza con fuerza. Oigo un trueno a lo lejos. Lloverá dentro de poco. Quiero decir algo, pero siento que las palabras sobran. Sigo abrazándola, hasta que noto que Gin llora.
-Justin...¿Cómo hemos podido acabar así?- Me pregunta separándose de mí y mirándome a los ojos. Me encojo de hombros y me vuelvo a perder en sus preciosos ojos. Y lo veo todo como en cámara lenta. Gin inspira hondo y se pone de puntillas. Me mira a los ojos y me dedica una preciosa caída de ojos. Me quedo paralizado. Y, por fin, se acerca lentamente y me besa. Siento como sí algo explotara en mi pecho, algo cálido que me recorre todo el cuerpo. Le cojo la cara con mis manos y la beso con ganas. Gin me pone los brazos al cuello. Siento como sí el corazón se me fuera a salir del pecho. La acaricio la cara con los dedos. La sensación que me recorre el cuerpo empieza a subir de temperatura hasta que siento que me voy a derretir, pero no me separo de Gin. Siento que es sueño hecho realidad. Gin me acaricia el pelo de la manera que sabe que me vuelve loco. Me muerdo el labio. Nunca pensé que esto volvería a pasar. Y de pronto, empieza a llover. Gin empieza a reírse y no puedo evitar reírme con ella. La cojo por la cintura y le doy una vuelta en el aire. Gin sonríe abiertamente. La dejo en el suelo y froto mi frente con la suya. Gin me mira a los ojos y me besa suavemente durante dos segundos y luego se separa sonriendo. Me muerdo el labio, ya conoce mi punto débil, sus labios. No sé como he podido sobrevivir este tiempo sin ella. Gin se aleja lentamente. La abrazo por detrás. 
-¿Porqué huyes de mí?- Le susurro al oído. Gin sonríe y me aparta el pelo de la cara.
-No huia, es que no quiero mojarme- Me dice riéndose. Sonrío y le cojo la mano. Gin me mira profundamente y se acerca a mí. Me abraza fuerte. La abrazo de nuevo.
-Te he echado mucho de menos- Me dice susurrando. 
-Te prometo, no espera, te juro que nunca más te volveré a hacer daño- Le digo cogiéndole la barbilla para que me mire a los ojos. Gin sonríe debilmente. 
-La última vez que me prometiste eso no te duró ni un día la promesa- Me dice sonriendo levemente. Le cojo las dos manos. 
-Pero esta vez es de verdad- Le digo serio. Gin ladea la cabeza.
-Me estoy mojando enterita- Me suelta riéndose. Narrado por Justin
Aparto una rama con toda la suavidad que me es posible. Mi corazón late desbocado. Intento mantener la calma, pero no puedo. Quizás lo consiga hoy, quizás me perdone, quizás todo vuelva a ser como antes. Sólo con pensar en eso se me poneuna sonrisa tonta en la cara. Pero no debo ilusionarme, sno lo he conseguido todavía ¿Qué me hace pensar que lo conseguiré hoy? Por fin llego, pero no la veo. Siento como sí todo se derrumbara. Ian me ha mentido. Me doy la vuelta para irme y oigo un estornudo. Mi corazón se enciende. Me doy la vuelta de nuevamente con lentitud. Y ahora la veo.Siento como sí todo se parara y sólo estuviera Gin. Me acerco lentamente y me siento a su lado. Gin me mira lentamente.
-¿Qué haces aquí?- Me pregunta.
- He venido a mirar las estrellas- Le digo suavemente aunque es mentira.
Gin se levanta y hace amago de marcharse. Le cojo del brazo con suavidad. Vuelve la cabeza hacia mí sorprendida y compartimos una dolorosa mirada. 
-Déjame irme, por favor- Me dice sin odio alguno por primera vez en dos semanas. Eso me hace vacilar, pero no me voy a rendir.
-No puedo-Le digo suavemente. Gin suspira.
-Justin...-Dice solamente.
-Gin...no sé como decírtelo ya, te quiero, eres lo mejor que me ha pasado nunca y aunque no lo creas, esto me duele tanto como a tí- Le digo acercandome a ella.
Gin se queda quieta mrando al suelo. Siento unas ganas incontenibles de abrazarla. Pero me aguanto. 
-Después de lo que ha pasado me cuesta mucho creerte- Me dice.
-Lo sé pero Gin yo nunca quise besarla, ella se me echó encima ¿Entiendes?- Le digo con suavidad. Gin levanta la cabeza y me mira profundamente. 
-Claro, lo entiendo, entiendo que eres como el resto de los tíos que van de tía en tía como de flor en flor- Me dice. La miro sorprendido.
-Tú sabes que no soy así, Gin me conoces como nadie lo ha hecho nunca- Le digo intentando poder volver a tener una oportunidad.
-Creí que te conocía, pero en realidad eres un completo desconocido para mí- Me dice. Toma aire profundamente y añade como sí eso lo aclarara todo- Te oí ayer hablando con Ryan-
Gin se da la vuelta y empieza a andar como para irse. Tomo aire. 
-No hablaba de tí Gin- Le digo ya desesperado. Gin sigue andando sin volverse. 
-Hablaba de Kylie, mi ex-novia- Le digo de pronto. Gin se gira un segundo, lo justo para ver que ha vacilado. La alcanzo.
-Gin, por favor, te necesito más que al aire, no me dí cuenta de lo que tenía y ahora me arrepiento con toda mi alma- Le digo cogiéndole una mano. 
-Justin, No te das cuenta ¿No? No te das cuenta de todo el daño que me has hecho, no, claro que no, tú sólo piensas en tí mismo y en lo que te ha dolido, ¿y yo qué?- Me dice enfadada.
-Gin, nunca he dudado del daño que te he hecho, jamás. Pero tienes razón, soy muy egoista y lo único que quiero es tenerte como antes, sin importar lo que he hecho- Le digo bajando la cabeza. Eso mina sus defensas. La veo derrumbarse. Y no puedo evitarlo. La abrazo con todas mis ganas. Gin trata de desasirse de mi abrazo, pero acaba cediendo. Sonrío. Necesitaba tanto abrazarla, necesitaba sentir su pelo suave contra mi mejilla, poder coger su cintura con suavidad, sentir su pequeño cuerpo contra el mío, lo neceitaba tanto...no me puedo creer que este ocurriendo esto. Y llega un momento en el que Gin me abraza con fuerza. Oigo un trueno a lo lejos. Lloverá dentro de poco. Quiero decir algo, pero siento que las palabras sobran. Sigo abrazándola, hasta que noto que Gin llora.
-Justin...¿Cómo hemos podido acabar así?- Me pregunta separándose de mí y mirándome a los ojos. Me encojo de hombros y me vuelvo a perder en sus preciosos ojos. Y lo veo todo como en cámara lenta. Gin inspira hondo y se pone de puntillas. Me mira a los ojos y me dedica una preciosa caída de ojos. Me quedo paralizado. Y, por fin, se acerca lentamente y me besa. Siento como sí algo explotara en mi pecho, algo cálido que me recorre todo el cuerpo. Le cojo la cara con mis manos y la beso con ganas. Gin me pone los brazos al cuello. Siento como sí el corazón se me fuera a salir del pecho. La acaricio la cara con los dedos. La sensación que me recorre el cuerpo empieza a subir de temperatura hasta que siento que me voy a derretir, pero no me separo de Gin. Siento que es sueño hecho realidad. Gin me acaricia el pelo de la manera que sabe que me vuelve loco. Me muerdo el labio. Nunca pensé que esto volvería a pasar. Y de pronto, empieza a llover. Gin empieza a reírse y no puedo evitar reírme con ella. La cojo por la cintura y le doy una vuelta en el aire. Gin sonríe abiertamente. La dejo en el suelo y froto mi frente con la suya. Gin me mira a los ojos y me besa suavemente durante dos segundos y luego se separa sonriendo. Me muerdo el labio, ya conoce mi punto débil, sus labios. No sé como he podido sobrevivir este tiempo sin ella. Gin se aleja lentamente. La abrazo por detrás. 
-¿Porqué huyes de mí?- Le susurro al oído. Gin sonríe y me aparta el pelo de la cara.
-No huia, es que no quiero mojarme- Me dice riéndose. Sonrío y le cojo la mano. Gin me mira profundamente y se acerca a mí. Me abraza fuerte. La abrazo de nuevo.
-Te he echado mucho de menos- Me dice susurrando. 
-Te prometo, no espera, te juro que nunca más te volveré a hacer daño- Le digo cogiéndole la barbilla para que me mire a los ojos. Gin sonríe debilmente. 
-La última vez que me prometiste eso no te duró ni un día la promesa- Me dice sonriendo levemente. Le cojo las dos manos. 
-Pero esta vez es de verdad- Le digo serio. Gin ladea la cabeza.
-Me estoy mojando enterita- Me suelta riéndose. Sonrío. No me lo creo. Me ha perdonado. Es lo único que he querido durante este tiempo. 
-¿Pues adonde vamos para no mojarnos?- Le pregunto acariciándole la mejilla. 
-Sorpréndeme- Me reta con una sonrisa pícara en los labios. Sonrío y entrelazo mis dedos con los suyos. Empiezo a andar hasta que a los dos minutos llego a la antigua casa del árbol que construí con Chris y Ryan. Sonrío. Hace años que no piso esto. Gin me mira con curiosidad. 
-No hay nada más cerca- Le digo encogiéndome de hombros. Gin sonríe dulcemente. La ayudo a subir. Miro a mi alrededor. Está como la dejamos. Sonrío.-Bonita casa- Dice Gin sonriendo. 
-La construímos Chris, Ryan y yo- Le digo. Gin me abraza fuerte. La vuelvo a abrazar con fuerza. Me separo de ella a regañadientes para coger las mantas que solía utilizar. Pongo una en el suelo para sentarnos y otra para taparnos. Gin se sienta suavemente y yo me siento a su lado. Le paso un brazo por los hombros. Gin apoya la cabeza sobre mí hombro y no puedo evitar sonreir. 
-¿Qué tal está Chris? Es que después de lo que pasó...- Me pregunta suspirando. Siento su aliento cálido en mi cuello y me olvido de lo que iba a decir. ¿Sobre qué me ha preguntado? No me acuerdo...Creo que sobre Chris...Sobre lo suyo con Jane...Creo...
-Pues la verdad, esta bastante bien, pero no sé- Le digo sin pensar en lo que digo. Gin vuelve a suspirar. Y sin pensármelo dos veces la beso. La cojo sorprendida pero no se aparta. Vuelvo a sentir el fuego que me dominaba la última vez, pero esta vez no hay nada que nos interrumpa. Juego con su lengua mientras acaricio con suavidad su cintura. Gin me pone las manos al cuello y el fuego no hace más que aumentar. Le muerdo el labio con suavidad y tiro de él hacia mí. Gin empieza a besarme de una forma que me hace sentir volar. Le acaricio los hombros lentamente mientras le empiezo a quitar la cremallera del vestido. Siento como los vellos se le ponen de punta a medida que su vestido va bajando.
(........)
-Te amo Gin- Le susurro al oído mientras nos separamos . La abrazo fuerte. 
-Me alegro de que mi primera vez haya sido contigo- Le digo juntando mi frente con la suya. Gin sonríe.
-Yo también me alegro de que la mía haya sido así- Me dice apoyándose en mi pecho. La paso el brazo por debajo del cuello y Gin se acurruca junto a mí. De pronto, siento una necesidad de protegerla y sonrío mientras le acaricio el pelo. Ni siquiera imaginé que acabaríamos así. Noto que se ha quedado dormida y sonrío más ampliamente. Lo de esta noche ha sido algo muy especial. Siento que estamos más unidos que nunca. La vuelvo a mirar. Ahora más que nunca me doy cuenta de que es lo mejor que me ha pasado nunca y no voy a volver a cometer el mismo error. Porque siento que es una parte imprescindible de mí y estoy seguro de que quiero pasar el resto de mi vida con ella.

11 oct 2011

Cap-49: Love Game ♥

Narrado por Justin
Aparco el coche suavemente. No sé para que he venido. Quizás necesite pasar página como dice Ryan, pero sé que a ella nunca la olvidaré.Desde aquí puedo escuchar la música de la fiesta. Suspiro. Escucho Little bad girl de David Guetta. Me gusta esa canción. Voy llegando hacia la fiesta y no puedo evitar ver a las parejas liandose. Me acuerdo de Gin. Sacudo la cabeza, hoy toca ir a divertirse. Claro, que eso va a ser bastante difícil. Entro en la casa y me adentro en la fiesta.
Narrado por Gin
Me doy los últimos retoques. Aplico un poquito de gloss y sonrío. Perfecta. No sé para que me arreglo tanto sí Justin no va a estar conmigo. Suspiro y me siento en mi cama. Me miro al espejo. Intento sonreir. Esta no es mi sonrisa. ¿Qué me ha pasado? Justin, eso es lo que me ha pasado. Abro la ventana de mi cuarto y dejo que la suave brisa invernal me acaricie la cara. Le veo salir de su casa. Entra en el coche. Seguro que irá a ver a Bella dice una vocecita en mi cabeza. A lo mejor va a la fiesta dice otra. Es más razonable la segunda pero es más fácil odiarle.
Narrado por Justin
Sigo sentado en la barra con Chris. Por lo visto Jane y él lo han dejado por la diferencia de edad. Vaya mierda. Así que los dos estamos igual. Bebo un sorbo de mi bebida. No estoy seguro de que es, pero está buena.
-Oye Justin ¿Esa es Gin?- Me pregunta Chris. Le lanzo una mirada asesina. Casi no pensaba en ella, casi. Miro hacia donde Chris está mirando y entiendo porque me lo ha dicho. En cuanto ha entrado todos se han vuelto a mirarla y más de uno se ha acercado a hablar con ella. Gin les sonríe fasalmente, pero les sonríe y eso me pone celoso. Gin debería estar conmigo, pero yo lo he estropeado todo.
Narrado por Gin
Busco a Caity con la mirada, pero no la encuentro. Sin embargo veo a Justin y a Chris. Chris me señala sorprendido y Justin vuelve lentamente la cabeza hacia mí. Un chico se me acerca y me saluda.
-Hola ¿Cómo te llamas?- Me pregunta sonriendo. Me recuerda a Justin. Tiene el pelo rubio hacia el lado y unos bonitos ojos celestes. Le sonrío y me acerco a él.
-Gin ¿y tú?- Le digo con una sonrisa.
-Peter, encantado- Me dice sonriendome. Le doy dos besos. Puedo sentir la mirada de Justin quemándome en la espalda. Sonrío. Me toco un mechón de pelo que se me ha descolocado. Siento una mano en mi espalda y me doy la vuelta.
Narrado por Justin
Gin le sonríe y se toca un mechón de pelo. La rabia crece en mí como la espuma. Me levanto rápidamente y voy hacia donde está Gin. De pronto, algo me retiene por el hombro. Me vuelvo decidido. Y veo a Chris con una cara rara. Y me doy cuenta de que esto me está afectando demasiado. Voy al cuarto de baño y me lavo la cara. Me miro al espejo. ¿Qué me pasa? Ya han pasado dos semanas desde que cortamos, pero no lo he superado. Quizás signifique que era la mujer de mi vida. ¿Eres gilipollas o que? ¿Cómo va a significar eso? Uff, no la puedo sacar de mi mente. Todavía sigo echando de menos su dulce sonrisa, su cálida risa, su forma de mirarme, su ceño fruncido cuando se da cuenta de que no la estoy escuchando. Sonrío sin quererlo y me pierdo en esos recuerdos. Salgo del baño y la busco con la mirada sin ni siquiera pensarlo. No la veo y me preocupo. ¿Porqué? Ni idea. Me acerco a Chris.
-¿Y Gin?- Le pregunto. Chris se encoge de hombros.
-Se habrá ido ¿Por?- Me dice, pero no le contesto porque la estoy buscando. No sé que porqué la busco. Quizás para volver a intentar que me perdone, la verdad es que no tengo ni idea. Me acerco a Ian que está con una chica ¡Por fin! Ian me mira con desconfianza.
-Ian ¿Dónde está Gin?- Le pregunto de mal humor. Ian me mira sorprendido.
-Se fue- Me dice serio.
-¿A donde?- Le pregunto.
-No sé, ¿porqué?- Me dice con desconfianza.
-Por que necesito verla Ian, de verdad- Le digo deseperado. Ian me mira sin saber sí fiarse de mí o no.
-Un momento- Me dice sacando el móvil y marcando un número.
-¿Gin?¿Dónde estás?- Le pregunta, mi cara se ilumina. Termina de hablar y cuelga.
-Está en un pequeño claro en mitad del parque de los árboles- Me dice con una sonrisa. Sonrío ampliamente- Suerte Justin-
Le doy las gracias y salgo corriendo de aquí.
Narrado por Gin
Jake me sonríe abiertamente. Me voy un paso hacia atrás y choco con Peter que me sujeta evitando que caiga. Le sonrío.
-¿Qué haces aquí?- Le pregunto con acidez. Jake sonríe.
-Vamos Gin, es una fiesta y ya no estás con Bieber- Me dice con una sonrisa.
-Eso no significa quiera estar contigo- Le digo sonriendo. Jake se acerca a mi oído y siento su aliento cálido.
-Vamos Gin, nadie se enterará- Me dice besándome la oreja. Me estremezco y me lo quito suavemente de encima. Jake me mira con deseo. Me coge de la barbilla y se acerca a mí.
-Eso te pasa por venir demasiado provocativa Gin- Me dice Jake segundos antes de besarme. Le sigo el beso. No sé porque me siento tan culpable sí ya no tengo novio, puedo hacer lo que quiera con otros chicos. Pero no puedo evitar que una parte de mi sé sienta culpable, esa parte de mi que sigue queriendo a Justin, esa parte que va encogiendo a medida que pasa el tiempo. Me separo suavemente de Jake. Sonríe enigmaticamente. Suena la canción Love game de Lady Gaga.
-Hold me and love me, Just wanna touch ya for a minute-Me susurra suavemente al oído mientras apoya su frente contra la mía. Recuerdos vienen a mí. Tengo que cerrar los ojos porque los recuerdos me abruman tanto que casi ni puedo respirar. Me aferro a lo primero que tengo delante para no caerme. Abro los ojos y veo a Jake mirándome preocupado.
-¿Estás bien?- Me pregunta.Niego con la cabeza y me salgo fuera. Jake me sigue de cerca.
-¿Te llevo?-Me pregunta. Asiento suavemente mientras me conduce hasta su coche. Entro en el asiento del copiloto. La radio empieza a sonar y en ella la canción Overboard de Justin.Cierro los ojos y Jake sigue conduciendo.Jake para delante de mi casa y me bajo. Ando lentamente mientras su coche se pierde en las oscuras calles. No tengo ganas de estar en casa. Empiezo a dar un paseo hasta que llego al parque, a ese parque donde compartimos nuestro último beso. Suspiro y me adentro en él.

4 oct 2011

Cap-48: I´m overboard...♥♥

Helllouuu sweetties ♥¿Qué tal os va todo? Pues a mí me va regu porque me estoy agobiando mucho :S Bueno siento a ver tardado tanto en subir pero es que me estaba agobiando y no he podido escribir, así que os dejo los dos. Un beso! ♥
Narrado por Gin
Miro fijamente la televisión mientras Ian se sienta a mí lado. Me pone un brazo por encima. Ian me mira mientras me acaricia el pelo. No me gusta que me haga eso, me recuerda a Justin. Cierro los ojos mientras vuelvo dos semanas atrás. Intento sonreír, pero sólo consigo forzar una mueca.
-¿Vas a ir hoy a la fiesta?- Me pregunta Ian sacándome de mis dulces ensoñaciones. Asiento lentamente con la cabeza. Ian sigue serio.
-Yo voy a ir con Lauren- Me dice suavemente. Sonrío levemente. Se ha dado cuenta de que no valgo lo suficiente ya. Normal. Ya no soy la misma. Todo por él, por Justin. Me levanto lentamente y me voy a mi cuarto. Me tumbo en mi cama y miro el techo. Le echo de menos. Echo de menos sus abrazos, su sonrisa, su risa, su mano cálida, su...todo. No debería haber sido tan dura con él, no se lo merecía. Sí tan sólo volviera a decir que me quiere, lo olvidaría todo. Sólo necesito eso, que me diga que me quiere, pero ya se habrá olvidado de mí. Se lo dejé muy claro, demasiado claro. Me levanto. Voy hacia la ventana. Me asomo al balcón mientras miro los árboles medio secos ya. Hace tiempo que no llueve y ya lo necesitan las plantas. De pronto, oigo su voz. Me vuelvo instintivamente y le oigo hablar con alguien.
-No, sigue pensando lo mismo, no es de las que cambia de idea como de ropa-Dice Justin mientras sale a su balcón. Me meto para dentro y me siento en la esquina para oírle hablar.
-Sí, sabía que se pondría así, lo niega todo pero sé que es mentira- Dice. Silencio. La sospecha atenaza mi corazón.
-He intentado que me perdone, ya sabes por la apariencia y eso, pero es cabezota- Otro silencio. Me encojo sobre mí misma. ¿No estará hablando de mí?
-Sigue pensando que todo lo hice para fastidiarla que no me he podido enamorar, la verdad es que ya me estaba hartando de ella, no sé, nunca me enamoré de ella todo fue mentira, por real que pareciese sólo lo hice por qué Scooter me lo aconsejó-Dice. Siento algo cálido en mi mejilla, una lágrima. Con que fue todo una mentira, nunca me quiso y yo aquí sufriendo. Ahora se va enterar, me digo mientras me levanto cerrando la ventana de un golpe. Oigo como me llama. Casi puedo sentir la mirada de Justin en mi espalda, pero no me voy a volver, debe saber que lo sé todo y que ya no puede hacer nada.

Narrado por Justin

-Un momento Ryan, que oído algo raro- Le digo. Me vuelvo justo para ver a Gin con lágrimas en sus ojos, dándose la vuelta rápidamente.
-¡Gin!-La llamo. ¿Me habrá oído? Oh, no. Me llevo las manos a la cabeza. ¿Y ahora qué hago? Nada, ¿qué puedo hacer? Me siento en el suelo, no puedo ya con esto. Es superior a mí. ¿Cómo voy a conseguir volver con ella? Creo que no voy a poder. Me froto la frente. La echo tanto de menos. -¿Justin? ¿Estás ahí?- Me pregunta Ryan.
–Si- Le respondo escuetamente.
-¿Qué ha pasado bro?- Me pregunta algo preocupado.
–Gin lo ha oído todo- Le digo repentinamente agotado.
–Pero estabas hablando de Kylie ¿no?-
-Sí, lo que pasa es que habrá entendido mal-
Cojo un trozo de papel y un boli de encima de mi mesa y garabateo unas palabras. Espero que esto sirva de algo.

Narrado por Gin

Al final, me acabo levantando y ya sé que voy a hacer. Voy a ir a esa fiesta. Y voy a estar súper guapa y le voy a dar celos. Eso es lo que haré. Ya me he hartado de ser la única que sufre aquí. Me pongo a buscar un buen vestido que llevar cuando veo que hay algo pegado en mi ventana. Me acerco a verlo y me llevo una mano a la boca. Es un papel blanco pegado con una flor que no conozco y que lleva escrita una sola frase. Inmediatamente reconozco la caligrafía, como olvidarla. Arranco el papel y lo tiro pero esa frase sigue en mi mente.


I´m overboard and I need your to pull me up ♥

24 sept 2011

Cap-47: Me has hecho demasiado daño...

Narrado por Gin
La profesora sigue hablando mientras yo hago como la que presta atención para no cruzarme con esos ojos miel. No podré evitarle para siempre, pero no es eso lo que me preocupa. Sé que me está mirando. Lucho contra la tentación que me lleva a mirarlo. No puedo, porque quebrantaría todas mis defensas. Pero quiero que lo haga. Quizás lo mejor sería dejar pasarlo todo.¿Pero que digo? No puedo, pero es lo que mi corazón más anhela. De pronto, el timbre suena y como de constumbre, la gente se levanta. Espero a Caitlin, Jane está con su madre. Salimos de la clase.
-Oye, ¿por qué no quieres hablar con Justin? Entiendo que estás enfadada con él, pero al menos podrías hablarlo con él- Me dice Caitlin.Dios ¿Se está poniendo de su parte? Normal, sí son muy buenos amigos.
-No es eso, es que sí lo hablo con él sé que acabaré cediendo y no quiero- Le digo mientras vamos a nuestros bancos de siempre. De pronto, los chicos llegan. Y empiezo una conversación absurda con Caitlin sobre ropa. Se sientan en el otro banco. Miro a Justin de reojo y veo que está con la cabeza baja y apenas presta atención a lo que dicen. ¿Estará triste por lo que ha pasado? Eso es imposible. Pero...¿y sí? No creo, pero no sé. De pronto, me pilla mirándole.
-Gin, necesito hablar contigo- Me dice suplicando-Por favor-
Todos se vuelven a mirarnos. Me muerdo el labio. No sé que hacer. Debería hablar con él y dejar las cosas claras, como dice Caity pero algo en mi interior no quiere.
-Vale- Digo sin pensar. El rostro de Justin se ilumina por un segundo y mi corazón late más rápido. Justin se levanta y yo le imito. Vamos hacia una esquina en la que no hay nadie. Le miro e intento que mi cara no refleje lo que mi corazón siente. Le miro.
-Bien, ¿y de qué querias hablar?- Le pregunto jugueteando con mis dedos. Justin me mira triste.
-Gin, lo que pasó el otro día...no significó nada para mí, lo que quiero decir es que yo no quería- Me dice Justin con voz suave. Mi corazón se enciende. Pero mantengo la calma.
-No me trago eso, Bieber dos no se besan sí uno no quiere- Le digo con calma.
-Igual que tú e Ian ¿No?- Suelta. Le miro. Parece sorprendido, como sí no lo hubiera querido decir. Pero eso es lo que me hace pensar que lo ha dicho de corazón. Y eso me ha dolido. Mejor, ya estamos en paz. Pero eso no me hace estar mejor.
-Al menos yo no te mentí-Le digo yo.
-Yo no te mentí-
-Sí, me dijiste que ibas al cine con tus amigos pero fuiste con ella-
-Yo no sabía que iba a venir, preguntaselo a cualquiera-
-Me da igual lo que digan los demás, sólo me importa lo que ha pasado-
Me doy la vuelta para irme, pero Justin me coge por el hombro. Me doy la vuelta para ver que quiere. Justin me mira con tristeza.
-Gin, lo siento. Tú eres la única que me importa, sin ti no puedo vivir porque tú lo eres todo para mí. Por favor, dame otra oportunidad, tú sabes que te quiero como a nadie- Me dice con su cara a dos centímetros de la mía. Bésale grita mi corazón desesperado, vete grita mi cerebro, bésale, vete, bésale, vete. Y, de pronto, tomo una decisión. Y se hace el silencio.
-Lo siento Bieber, una oportunidad fue más que suficiente- Le digo bajando la cabeza. Justin me coge por la barbilla y me mira a los ojos.
-¿Por qué? Aún me quieres, lo veo en tus ojos- Me dice mirándome fijamente. Me siento enrojecer y le vuelvo la cara.
-Por que me has hecho demasiado daño- Le digo volteandome para que no me vea llorar.